domingo, 28 de julio de 2019

HUGO CHÁVEZ FRÍAS: Una voz que habla a través de los tiempos


El solo hecho de recordar al Comandante Supremo Hugo Chávez nos enaltece el pensamiento y los sentimientos se desbordan por las fibras del alma, desde donde brotan las corrientes cristalinas de la fe por la obra y el legado de ese gran hombre, ese gran venezolano,  cuyas palabras retumban cada día con más fuerza en la conciencia de todos.

Sin duga alguna, Hugo Chávez Frías (1954-2013) fue y será un venezolano de una extraordinaria grandeza humana y además, consecuente con sus ideales, con el verbo, con la acción y el compromiso por la vida de la República, por la paz y la justicia social. Precisamente, eso es  lo que ha identificado a los grandes hombres y mujeres a través de los tiempos, quienes con sus pensamientos y su lucha han sido ejemplos para la humanidad y para la patria donde les tocó nacer y vivir. Así encontramos a Cristo, cuya práctica de vida fue por la paz y el amor; a Simón Bolívar, quien sembró la libertad en la conciencia de la humanidad y empuñó la espada para emancipar a naciones enteras; a José Martí, de Cuba; a Sandino, en Nicaragua; a Salvador Allende, en Chile; y así tantos hombres y mujeres que fueron consecuentes con sus ideales, con sus luchas y que nunca traicionaron sus propios destinos, ni a sus respectivas patrias.

En Venezuela, en esta historia reciente, conocimos la grandeza de un ser humano, humilde, pero con una fuerza, con un amor inmenso por su pueblo, por su gente, por su país. Es Hugo Chávez  ese extraordinario ser humano. Él supo comprender el palpitar de la patria, palpar la realidad nacional y con su ejemplo de lucha, de entrega, de amor por los niños, por los ancianos, por los hombres y mujeres, desplegar una grandeza de ser humano plasmada en cada uno de sus actos, de sus discursos y de su pensamiento, que constituyen un legado que se ilumina con cada palabra, con cada frase que los venezolanos y venezolanas hemos hecho nuestra, para seguir la eterna marcha de la vida, rumbo hacia las llanuras infinitas del horizonte de la patria.

¡Qué grande fuiste Chávez! Despertaste las neuronas de la conciencia y las fibras del ser nacional y con tu visión del destino luminoso, trazaste las coordenadas, las líneas y las sendas de la Venezuela del Siglo XXI. Llegaste montado en la brizna del tiempo preciso y necesario para empezar a sembrar las semillas revolucionarias del cambio y la transformación. Tú mismo las sembraste en cada rincón del sistema político venezolano y en todo el entramado institucional del Estado venezolano, en cada sector, en las mentes y corazones de los hombres y mujeres de este país. Pronto esas semillas germinaron y comenzó la cosecha del cambio y de la refundación de la República. Las lluvias de brisa fresca hicieron brotar sentimientos espirituales profundos que marcaron otra etapa revolucionaria, llena de pueblo y de comuna como expresión del poder popular.

Hoy, 28 de julio es tu fecha de cumpleaños número 65, pero tu grandeza era inmensa y un día  te fuiste Comandante Supremo, rumbo a la eternidad, donde brilla la grandeza de Nuestro Dios y Padre Universal. Vaya tarea la tuya, dejarnos una patria viva, vibrante, que en estos días ha sentido los fogonazos del imperialismo norteamericano y el fascismo de la derecha venezolana y latinoamericana, que quieren acabar con tu obra y con tu legado. Realmente eso será difícil, por más patadas que den en su locura irracional, el imperio y los fascistas no podrán quebrar nunca jamás este sentimiento de amor que tu sembraste; tampoco podrán  quebrar el alma de esta patria que nos dejaste.

Chávez, fuiste un gran Presidente, un estadista; pero más que eso fuiste un patriota, un compatriota, un amigo, un camarada, un hermano, un padre. Tu lucha es nuestra lucha, tu compromiso ahora es nuestro compromiso; Tu legado, es la mejor herencia que nos dejaste y será la guía permanente para defender la patria en cada esquina, en cada calle, en cada avenida y en cualquier escenario donde sea necesario. Nuestro reto es no fallarte nunca y con tu ejemplo de vida y de líder, enfrentaremos las situaciones presentes y futuras. Hoy, la miseria humana, manifestada a través de la conducta violenta de los fascistas, nos pone a prueba; sin embargo, hemos enfrentado toda esta arremetida violenta con un llamado a la paz, evitando cualquier tipo de enfrentamiento. Sabemos que así hubiera actuado usted, llamando al diálogo, tal como lo hiciste en el 2002, cuando los grupos opositores y de la extrema derecha dieron un Golpe de Estado. Por eso decimos que tu voz y tu legado están más vivos que nunca.

De verdad, Chávez anda por ahí,  conversando con los niños y niñas, con los millones de hombres y mujeres de este país; desayunando con cada familia, sembrando con los campesinos, marchando con las milicianas y milicianos,  pescando allá en el Arauca, jugando una partida de dominó, de ajiley o de truco allá en mi Pueblo de San Miguel, estado Anzoátegui; cantando con la juventud venezolana, para enseñarles los valores de la vida; acompañando a cada estudiante de las escuelas, de los liceos y las universidades para vuelvan a sus aulas y asuman el compromiso de estudiar, luchar y debatir las ideas de la verdad, para que todos juntos terminemos de construir esta patria y no seguirle el juego a la oposición que quiere incendiarla y entregarla a la jauría imperial.

Sí, por allí anda Chávez, con su mirada, con su corazón palpitando en el pecho de millones de hombres, de mujeres, de ancianos y niños, que no olvidan a ese soldado, a ese gran estadista que supo interpretar el sentimiento de todo el pueblo. Efectivamente, Chávez sigue presente en la consciencia revolucionaria de todo el país y sus palabras, su discurso, su pensamiento, su proyecto y todo su legado es parte de la lucha del pueblo chavista, del PSUV, de los Consejos Comunales, de las universidades de vanguardia, de las milicias y cuerpos combatientes, de las UBCH, los CLAP, los colectivos de trabajadores y todos los frentes de batalla y ahora el Movimiento Somos Venezuela, dispuestos no solamente a defender con todo el coraje y la valentía el legado de Hugo Chávez.

Hoy más que nunca tenemos un tremendo compromiso con la patria, con la familia y con nosotros mismos.

De verdad, Chávez se quedó para siempre con nosotros. Por eso no se debe permitir que nadie profane su pensamiento y hable mal de su legado, que es nuestra fuerza moral y espiritual, nuestra verdad con la que estamos blindados para defendernos de los feroces ataques de la jauría opositora. En este país siempre se hablará de Chávez y su grandeza de ser humano, por eso decimos con fuerza:  ¡LEALES SIEMPRE, TRAIDORES NUNCA!

Eduardo Marapacuto
Politólogo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Normalización de relaciones fronterizas entre Venezuela y Colombia avanza a «paso lento»

  Experta asegura que normalización de relaciones fronterizas entre Venezuela y Colombia avanza a «paso lento» CARACAS.- Danna Urdaneta, in...